Ya había dejado de ser un desconocido en el fútbol soviético cuando su actuación en los Juegos Olímpicos de Melbourne hizo que el resto del mundo comenzara a posar sus ojos en un delantero que la prensa inglesa describió como “alto, potente, fino al primer toque y con una extraordinaria inteligencia para jugar”, además de destacar su especial habilidad para dar pases de taco. La hermosa costa de Bournemouth inspira el diseño de este kit, que presenta tonos turquesa y una imagen del paisaje y su particular muelle.